
La diferencia más importante en la conducción nocturna es la visibilidad. Por la noche, nos volvemos totalmente dependientes de las fuentes artificiales de luz para ayudar a vernos y mostrarnos dónde vamos. Señales de tránsito, peatones y otros vehículos son más difíciles de ver en la noche. Por lo tanto, las luces, los espejos y las ventanas son doblemente importante por la noche. Debemos mantener los espejos claros, limpios y libre de la nada y ventanas. No deben verse empañado por el vapor, el hielo, gotas de agua o empañada por grietas o rasguños.
Equipos de su coche entero iluminación deben estar en buenas condiciones para garantizar la seguridad al conducir en la oscuridad. Faros, luces traseras, luces de esquina, lámparas de señalización, luces de matrícula y otros, juegan un papel muy importante en su seguridad al conducir de noche. Las luces deben encenderse durante la noche, especialmente durante los períodos de lluvia, nieve, granizo, aguanieve o la niebla. Asegúrese de que los faros han sido correctamente enfocados.
Hágala revisar por un profesional para asegurarse de que todas las luces funcionan. Mantenga sus luces y sus parabrisas limpios. Recuerde que las luces son su única comunicación con otros conductores en la carretera. Asegúrese de que el parabrisas está limpio, claro y sin obstrucciones para que pueda ver lo que está delante de ti. Uno de los hábitos más peligrosos que los conductores que hacer durante la noche es "saturar" las luces de sus vehículos.
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